El sello de la Noche Azul nos habla del misterio, del mundo onírico y del silencio interior. Esta energía despierta en nosotros el sentido de la intuición y utiliza el espacio nocturno de los sueños para conectar con la información.
Lógico, poderoso, profundo, capaz de manifestar, introspectivo, intuitivo, soñador, creativo. La luz interna nos guía en la oscuridad y desvela el misterio de la sombra, en ella reside la abundancia que contiene nuestro interior.
Los Sueños
Los sueños son el poder interior de cada persona para generar imágenes, podemos hacerlo despiertos o dormidos; por eso representa el poder de la psique. Conectar con ella es adentrarse en ese espacio donde todo es posible, allí reside nuestra capacidad creadora de imágenes y fantasía y donde percibimos el misterio y lo misterioso del Ser. Conectar con la energía de la Noche es resonar con nuestra capacidad creativa para despertar nuestra intuición.
Los sueños nos permiten ver y experimentar en un plano invisible, allí no permitimos que los limites nos condicionen y por tato ejercemos una libertad que en nuestra realidad no concebimos. Desde ahí tenemos la posibilidad de materializarlo y hacerlo real, si creemos en nuestro poder y potencial.
Creamos con un pincel de luz en un lienzo oscuro y damos vida a deseos y anhelos, si creemos firmemente podemos manifestar esta luz en nuestras vidas, solo sintiendo que no existe la carencia en nuestras capacidades, actuando guiados por nuestra intuición y despertando nuestro poder creativo podremos percibir la verdadera abundancia interior.
Nuestros sueños son la manifestación artística del Cosmos y los mensajes de nuestros ancestros que nos señalan puertas dimensionales, el espacio que abrimos primeramente es oscuro, con la confianza y sin miedo lo iluminamos para que podamos realizar con plenitud nuestras vidas personales, familiares, colectivas y sociales.
El Día y la Noche
El día y la noche son una expresión hermosa de complementariedad natural. Es la convivencia armónica entre distintos. La claridad es el movimiento, la acción, el trabajo, la producción y el cultivo de la vitalidad. La oscuridad es el reposo, el descanso, el reencuentro y la recuperación.
Ambos estados se ceden el paso el uno al otro, se esperan, se unifican para la realización de la vida. Este es el sentido de los ciclos naturales del Universo.
Son estados de tiempo y materia que posibilitan el florecimiento de la vida y el reposo de la vida para volver a florecer.
Este es el sentido de partir del origen para volver al origen, la dualidad complementaria. Por eso representa las dos caras de una moneda, dos energías contrarias y a su vez armónicas; la salida del sol y la puesta del sol, el amanecer y el atardecer, el frío y el calor, la luz y la oscuridad… las dos polaridades de la energía.
Todos los seres tenemos cambios en nuestras vidas, estos son cronológicos, cíclicos e individuales, que varían o transforman nuestro destino.
Así la energía de la noche es la fuerza renovadora, es salir de la rutina, de la monotonía, soltar las amarras y emprender un nuevo rumbo. Es abrirse a la abundancia cíclica del cosmos, entendiendo que todo va y todo vuelve, y en el proceso siempre hay un poco de luz en la noche y un poco de sombra en el día.
La Personalidad Noche
Una Noche despierta es una persona reflexiva y soñadora. Disfrutan con la noche y el conocimiento del cosmos, atrayendoles todo lo misterioso, mágico, fantástico y desconocido. Obtienen siempre lo que quieren o necesitan sin demasiado esfuerzo. Su intuición y su poder creador son muy potentes, les encanta soñar de noche y de día, ya que sueñan también despiertos. Espirituales, telepáticos y visionarios a través de los sueños.
Una Noche dormida abusa de la autocrítica, no quiere verse interiormente. Se cierran en si mismos y solo son capaces de ver sus carencias, sus estructuras internas dan fuerza a la parte más oscura de sus creencias, sintiéndose incapacitados y faltos de recursos. Pueden caer en la ambición desmedida o la carencia absoluta de bienes espirituales y/o materiales. No quieren ver sus sombras interiores, tienen miedo y no se creen merecedores.
Un día Noche
La energía de un día noche es buena para reflexionar sobre la información de los sueños, practicar la interpretación del lenguaje onírico, meditar e ir hacia tu interior, al lugar potencial donde todas las posibilidades existen. Es un día sagrado que promueve el aprendizaje de la dualidad, su energía es potente ya que mantiene la conexión luz-oscuridad al unísono. Un buen día para reconocer nuestros errores conscientes o inconscientes con humildad. Un día para dar y recibir regalos, soñar, desear y pedir lo que creemos necesitar o queremos. Favorece la creatividad y el arte.
Datos técnicos
- Sello: Noche
- Color: Azul
- Familia: Familia Señal
- Elemento: Agua
