Producimos la magia cuando manifestamos que somos consciencia, cuando nos damos cuenta que la vida está para vivirla, para afrontar las transformaciones, los miedos y poder re-convertirnos en los niños ilusionados que éramos, recuperar lo que hemos perdido por el camino de hacernos mayores.
Día 10 de la onda del Mono.
Recordar que somos amor es lo que nos devolverá la magia, si perdemos de vista esta parte vital el juego se torna sufrimiento, nos enfadamos y optamos por ser egoístas, una actitud defensiva que anula el propósito esencial de vivir.
El sello Sol
Brilla con una fuerza inusitada, nos invita a participar de la mente consciente que sabe funcionar por encima de las circunstancias, sólo por el hecho de habernos levantado esta mañana deberíamos estar alegres y agradecidos, ¿porqué entonces no somos capaces de sentirnos privilegiados?
La vida no se entiende sin amor y el amor trae alegría, felicidad y buena vibración, olvidarnos de esto es olvidar aquello para lo que hemos nacido
El tono 10 Planetario
Nos ayuda a movernos hacia la mejora tanto personal como de vida.
Hoy la energía del Padre Sol te envuelve en su luz para que puedas darte cuenta que estás aquí para alguna cosa más que ir a trabajar, pagar impuestos, ir a comprar, etc.
Te propone incluir tu luz como elemento básico en la fórmula que usas para crear tu vida, la espiritualidad no se encuentra en templos o iglesias, habita en ti y como bien decía Federico de Robertis: «tenemos que hacer la espiritualidad más urbana», es decir, bajarla a nuestros quehaceres diarios, porque la verdadera consciencia reside en los pequeños actos de amor que haces cada día.
Decreto:
Cada acto hecho con amor mejora mi vida, permito que mi niño interior despierte la luz que reside en mi, yo soy otro tú.
Es el momento idóneo para manifestar hoy y no mañana, la magia en tu vida, escúchate con más atención, amate para expandir amor.
Y para terminar esta reflexión, os invito a que leáis esta cita de Rabindranath Tagore:
» Cuando cerré los ojos, tuve un último pensamiento:
incluso cuando permanezco inconsciente en el sueño,
la danza de la vida continuará en el campo silencioso de mi cuerpo dormido,
con la misma cadencia que las estrellas allí arriba.
El corazón latirá, la sangre fluirá por las arterias
y los millones de átomos que viven en mi cuerpo vibrarán al compás del arpa
que se estremece bajo los dedos del gran Maestro»
2 respuestas
Precioso comentario el de hoy que me ayuda a reflexionar mucho sobre cómo vivir mi vida al máximo dando y sintiendo vel amor en cada momento
Gracias gracias gracias de corazón
Que la paz te acompañe y nos sigas iluminando con tus notas
Gracias, feliz fin de la columna mística, abrazo