Las encrucijadas despiertan en nosotros sentidos dormidos para empujarnos a cambios y nuevos caminos
Día 11 de la onda de la noche. Hoy la elección del camino se hace presente, ¿sigues con tus cargas de siempre o cambias de dirección?
El sello Caminante nos habla de centrar la energía, vamos dando tumbos, sobre todo en lo que no tenemos claro, lo que nos preocupa o lo que no hemos resuelto. Si te quedas con las expectativas subes y bajas, ahora te ilusionas, ahora te decepcionas; ahora ves mejora, ahora la realidad no ha cambiado; ahora crees que puedes, ahora te desesperas porque no aparecen resultados… Si te vas al cielo te olvidas de la tierra y viceversa, por eso el caminante es capaz de moverse entre ambos sin involucrase y este es el trabajo de hoy.
No es fácil la neutralidad, estar en todas partes y en ninguna manteniendo el centro estable, pero somos nosotros los que rompemos los límites y a la vez los imponemos, abrir y cerrar puertas para al final encontrarte en el mismo sitio es una gran pérdida de tiempo.
Por eso hoy el tono 11 espectral nos ayuda a sentir lo que es y lo que no es, lo que quieres y lo que no quieres, lo que forma parte de ti y lo que no, porque en el reconocimiento de tu estructura interna de funcionamiento encontrarás las respuestas y por tanto el enfoque que te ayudará a soltar, liberar, cambiar y transformar lo que sientas limita tu avance evolutivo.
Hoy explórate, se el vigilante de los pensamientos e ideas que pasan por tu mente, porque es lo que atraes, aceptas y cobijas en ti. Vigila también tus emociones, se capaz de ver como suman o restan a tu manera de ser y hacer; todo este trabajo es para que abandones pautas y creencias que limitan tu vida, que te sumergen en bucles de entrada y salida sin moverte de sitio, y es claro que cuando avanzas vives situaciones diferentes y nuevas, por tanto la falta de ellas ya te sugiere donde estás.
Es día de transformación, reestructuración y conexión interior, lo que sientas en tu corazón es lo que debes vivir, no tengas miedo de liberarte de cargas, si lo que vives no sirve a tus propósitos cambia, desestimalo, porque seguir aferrado ahí no trae a tu vida lo que sueñas y deseas.
No es momento para miedos, es momento de romper con límites que no son reales y descubrir que las barreras que me parecían infranqueables ahora las puedo saltar. Yo abandono mi concepto limitante de la vida, sin miedo me libero de todo aquello que no suma a mi felicidad, soy otro tú.
