Confianza y paz interna nos es algo con lo que negociar, por tanto hay que restablecer nuestro punto de equilibrio entre luz y sombra, entre hacer y no hacer, y supone frecuentes cambios de rumbo, estar atentos a movimiento transformativo de la vida
Día 2 de la onda del Guerrero.
Nuestro cuerpo se rige por ciclos igual que la Naturaleza y estos forman parte de nuestro crecimiento vital y espiritual, porque también somos espíritu, energía, materia viva, consciencia.
El sello Tierra
Nos habla de sincronías, porque ellas nos indican el camino hacia la sanación del ser, pero hay que escuchar, sentir, limpiar la mente de toda la basura emocional que solo nos distrae de nuestra verdadera vida. La Tierra es Madre, es Sanadora, es Purificadora y es nuestra Casa, cuidémosla tal y como ella lo hace con nosotros, darle amor supone recibirlo de ella.
El tono 2 Lunar
Nos dice que permanecer y estabilizarse en un estado de no ego es el reto de esta onda de 13 días; traer Luz a la Tierra, pacificar los conflictos de la mente y no distraernos para percibir las sincronías o mensajes que la Madre nos muestra.
Mensajes internos, mensajes externos, atención a lo que nos rodea… las señales están ahí si quieres verlas
Hoy deja que tu atención fluya sincrónicamente con tu corazón, permite esos momentos o espacios, sin juzgar, donde tu espíritu tenga la oportunidad de comunicarse contigo.
No caigas en: «claro!! es casualidad», recuerda que en el universo no existe nada al azar, todo está conectado y sincronizado, así no desestimes aquello que se mueve a tu alrededor, aquello que ocurre, pequeño o grande es el regalo que te ofrece tu espíritu para que lo abraces, avances y evoluciones.
Habla con el espíritu de los árboles, del bosque, de las montañas, de los ríos, del mar… si vives en la ciudad busca un ratito del día y siéntate en un parque o en la hierba, y siente… si tienes el acceso a un hábitat natural da un paseo, descalza tus pies y siente lo que la Tierra te dice, abraza el mensaje como parte de tu ser
Decreto:
Mi naturaleza es divina, me sincronizo, yo soy otro tú