Kin

Confiar en nuestra luz interna, hace que nuestra esencia despierte a la verdadera consciencia de lo que somos.

Día 9 de la onda del Guerrero.

Todo lo que necesitamos reside en nuestro interior, es nuestra esencia la que marca la diferencia, ¿le tienes miedo a tu propia luz?

La energía de la Semilla

Nos cuenta nuestra historia, nos anima a generar la magia interna, nos muestra lo que somos y en lo que podemos llegar a convertirnos, si decidimos desarrollar nuestras raíces, como base sólida para nuestro crecimiento.

Recuerda que la Tierra te ofrece un espacio sagrado donde florecer, así el Planeta nos ofrece un lugar sagrado donde Ser y manifestar nuestra Luz.

El tono 9 Solar

Nos dice: la cuestión es simple, ¿queremos ser uno más de la manada de ovejas? o por el contrario ¿queremos sentirnos especiales?

Cuando descartamos el «qué dirán» y/o «qué pensarán», empezamos a destacar por nosotros mismos, y sin que esto nos lleve a la soberbia o el ego, potenciar nuestras cualidades y talentos es lo que verdaderamente nos ayudará no sólo a entender quienes somos, sino también a crear una vida más acorde con nosotros.

Hoy despierta aquello que duerme silenciosamente en ti y aun no eres capaz de ver; empieza por valorar todo lo que haces para que tu vida sea más fácil, da importancia a los gestos de agradecimiento y amor que das y recibes a diario, respeta las palabras no dichas para no hacer daño… fíjate en lo pequeño y sencillo, porque eso te explica con gran lujo de detalle como eres

Crecer en consciencia es un impulso que se siente dentro, date permiso para actuar para tu mayor bien, y si! en el paso a paso surgen los miedos, pero no dejes que tu mente centre su atención ahí, no dudes ni desconfíes porque el mapa de ruta está en ti.

• Pregunta: ¿realmente actúas desde la magia del espíritu o lo haces desde la mente limitante?

Recuerda, la intención debe acompañar lo que pulsa tu alma, no debe estar a las órdenes de la razón y el ego.

Decreto:

Yo siembro amor en mi corazón para que florezca en mí la fuerza del espíritu que me habita, yo soy otro tú