Luna Planetaria de la Manifestación
Iniciamos la Décima Luna del año, 28 días que aprovecharemos para poner la atención en cómo es nuestro momento actual, ya que este es consecuencia de nuestros movimientos anteriores, para ello podemos hacer el ejercicio de recordar el proceso vivido hasta ahora.
El proceso de manifestación requiere de consciencia y claridad, porque mejorar los resultados, es decir intervenir en nuestra realidad, eso nos sitúa en la tesitura de saber desde donde nos hemos movido y como lo hemos hecho, sólo debemos fijarnos y ser conscientes de nuestra acción y todo lo que la acompaña.
Si quieres comprender el proceso debes averiguar como estás creando tu vida; Muchas veces no entendemos porque lo que hacemos no funciona y no nos paramos a reflexionar sobre ello, solo nos lamentamos y seguimos repitiendo el patrón, por eso es tan importante que sientas en tu interior la estructura que usas para mover tu energía.
Por eso estos días mira bien lo que te rodea, a veces lo que estamos viviendo no nos gusta pero en el fondo de nuestro ser sabemos que necesitamos pasar por ello, porque para mover la energía a nuestro favor, primero hay que ser consciente de que es lo que estamos creando.
Mejorar nuestra vida implica reconocer lo que no estamos haciendo bien, sin eso no tenemos motivo para movernos, y por supuesto como gestores de nuestra realidad sólo nosotros debemos encontrar la fuerza y el impulso para cambiarla. Por lo que aquello que no está funcionando o fluyendo nos muestra precisamente donde debemos mejorar, donde debemos intervenir de manera más consciente.
Acciones para esta Luna:
El propósito de Manifestar significa encontrar la manera de mejorar tu vida, porque todo resultado se puede mejorar, toda situación se puede superar, todo patrón se puede cambiar, sólo hay que prestar atención y no conformarnos con la realidad que obtenemos.
Iniciamos el año con propuestas, temas, situaciones y relaciones que mantenían una dirección, analizar que ha pasado con ellos nos lleva a la situación actual. Ser consciente del Ahora que nos rodea nos permite percibir los rumbos que está tomando nuestra vida.
Céntrate en producir la materialización de las ideas-pensamientos, experimentándolas en tu realidad. El proceso de creación requiere un sentido y un fin, unas herramientas y conocimientos, una intención y una inspiración… el resultado se manifestará acorde con todo ello. A eso súmale el amor que sientes por lo que vives y…voila!!! Aquí lo tienes. Todo lo que falle en esta fórmula, debes mejorarlo.
Me gusta, no me gusta; estoy conforme o estoy en desacuerdo; es lo que quiero o sólo se parece; podría hacerlo mejor o ya es suficiente, etc; cuestiones que debes plantearte para entender la posición que ocupas. Siempre puedes cambiar lo que vives si te comprometes a salir de tu zona de confort, para ello debes desear intensamente algo diferente, debes reconocer donde gestas los errores y aprender a resolverlos sin sentimientos de culpa o fracaso.
Acción y compromiso, porque lo que experimentas es lo que creas, así si produces desde la alegría se manifiesta alegría, si produces desde la rabia se manifiesta el enfado, si produces desde la duda se manifiesta la inseguridad, si produces desde el amor se manifiesta la felicidad; pregúntate ¿qué pensamientos y emociones uso para moverme?
El camino que ya has transitado te sirve de aprendizaje, en él puedes consultar y buscar puntos de inflexión, esto te ayudará a entender la situación actual y por tanto a saber que acciones emprender a partir de ahora.
Mueve la energía a tu favor, date cuenta de donde ha fallado la cadena de montaje, es importante hacer esta reflexión, ya que te permite rectificar, mejorar, cambiar y solucionar las situación-realidad que se ha generado. Pero somos muy inconscientes, nos dejamos llevar por los estados de ánimo, las ideas preconcebidas, los patrones antiguos que sólo buscan parar nuestro avance evolutivo.
Deja de mover la energía en tu contra, acepta fluye y actúa, suelta ya aquello que no te trae felicidad.
Avanza sin dudar, recuerda que todo es más fácil de lo que crees. Debes ocupar ese espacio donde recuperar tu serenidad, para situarte de nuevo en tu centro, desde ahí mira-te, busca aquello que no está en orden y encuentra una mejor solución.
Promueve tu autoestima, date ánimos, cree en ti. Reforzar la confianza en nosotros mismos es fundamental para no desanimarnos o renunciar a lo que queremos. Si estás en el camino correcto la vida te ayudará si pones de tu parte, así que confía en que eres capaz de sincronizar-Te.
Mejorar o perfeccionar nuestros propios resultados, no tiene que ver con nada que provenga del exterior, es la sensación interna de que podemos hacerlo mejor para sentir que siempre hay salida o solución, pero tendemos a no creernos capaces, optamos por lo de siempre porque nos parece más fácil, menos esforzado. Así es como entramos en la paradoja, ya sabemos que vamos a encontrarnos con la misma dificultad, que repetiremos el patrón y que no conseguiremos nada diferente, porque esperamos que lo de fuera cambie sin mover ficha dentro.
Tu mente es más hábil y más rápida que tu, distorsiona la secuencia antes de que te des cuenta, te dejas engañar porque cambiar seguramente te supone perder o abandonar aquello que tanto te has esforzado en construir.
