Luna Lunar del Desafío
Iniciamos la Segunda Luna del año, 28 días que aprovecharemos para detectar de manera clara los retos o desafíos que se nos presentan este año en relación a lo que queremos conseguir.
Esta Luna nos habla de conocer la parte fácil y la difícil del proceso, para mover la energía de manera consciente a nuestro favor
Si sabes por donde no debes ir, o a que no le debes dar ni poder ni tregua, evitarás gran parte de los problemas, aunque eso no excluye el tener que poner nuestro esfuerzo y energía en ello.
Desafiar o retar nuestra mente a ir más allá, nos obliga a movernos de la zona de comodidad, es importante tomar consciencia de que siempre hay opción, siempre existen soluciones o caminos, porque sea como sea la situación, tu voluntad y fuerza interior es capaz de darle la vuelta a lo que vives.
Este es el momento de enfrentarnos con la dualidad que nos plantea el camino que hemos tomado.
Acciones para esta Luna:
1. Observar bien donde siempre te encallas, que tendencia adoptas delante de los problemas que surgen y si tu debilidad es emocional o mental.
Hay retos o desafíos que aparecen sin desearlos o esperarlos y otros que provienen de nuestras propias propuestas, en todos ellos debes decidir si quieres afrontarlos o no, para ello evalúa a donde te llevan, es decir que consigues si lo superas, así sabrás si vale la pena vivirlos.
2. El propósito del desafío es que te conozcas mejor, que aprendas algo sobre ti y despiertes tus recursos dormidos para empezar a usarlos, por tanto aceptar los retos nunca es un ejercicio sin sentido, ya que nos pone delante la oportunidad de reconocernos en aspectos que no considerábamos de nosotros mismos.
3. No abandonar a la primera de cambio. Todos los desafíos cuestan, hay que ponerle esfuerzo, voluntad y paciencia, pero no podemos sucumbir por miedo, porque entonces nos negamos a aprender lo que necesitamos para avanzar.
Eso si date treguas, descansa cuando necesites, enfádate si no sale o te cuesta pero que no alargues ese estado, si te caes debes volver a levantarte, busca la manera de recargar tu energía.
4. Si el desafío es muy grande divídelo en etapas o en pequeños retos, ir consiguiendo metas te animará y motivará. Hay momentos en los que deberás mirar atrás y darte cuenta de lo que has logrado.
La vida nunca te planteará algo para lo que no estés preparado, delante de cualquier desafío no te escabullas ni te engañes por miedo o inseguridad, intenta aplacar tu mente y tu corazón explicándote la verdad, porque en el fondo de ti sabes perfectamente que puedes superarlo.
5. Para mantenerte en pie procura siempre ser consciente de lo que hay detrás de lo que vives, porque a simple vista solo verás problemas, esfuerzo y un largo camino, pero si te fijas bien todo desafío esconde un regalo, descubrirlo forma parte de jugar a superarlo.
6. Promueve tu autoestima, date ánimos, cree que puedes superar lo que sea y ponte a ello. Reforzar la confianza en nosotros mismos es fundamental para no desanimarnos o renunciar a lo que queremos. Si estás en el camino correcto la vida te ayudará si pones de tu parte, así que confía en tus talentos y habilidades, y potencialos.
Poder vivir un desafío que nos conduce a un propósito que queremos conseguir nos hace sentir vivos, es la forma que tiene la vida de espabilarnos para que no nos durmamos en los laureles ni posterguemos nuestro viaje aquí en la tierra. Aprender más sobre nosotros es un regalo.
